A veces hay que subir trastos, que suelen pesar, para disfrutar de maravillas como fue la atapecida y la alborada que disfrutamos en Sanllagu.
En este caso se cumplió con creces aquello de que todo esfuerzo tiene su recompensa.
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1 comentario:
¡¡Por fin!!
Tardaste pero conseguístelo.
Ya tienes un chalé nes afueres.
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